jueves, julio 26, 2007
Pacto negro
Aunque salió hace ya varios días, éste sigue siendo el mejor reportaje sobre el caso Ye Gon que haya leído. Visiten el sitio web de Quehacer político, compren y apoyen la revista; un periodismo arrojado, como el del que ellos dan muestra, es el que necesitamos.
Los entretelones y entrañas del caso Zhenli Ye Gon: El pacto negro (cuasi) secreto
David Casco Sosa, Martín Morales
Quehacer político
15 de julio de 2007
Fuentes gubernamentales de alto nivel revelan cómo negoció en secreto el empresario de origen chino con las autoridades de Estados Unidos y México
Como si fuera un thriller policiaco o guión de una película de misterio, el caso del chino nacionalizado mexicano Zhenli Ye Gon está próximo a dar “giros de tuerca”. Mucha información está fluyendo sobre el dueño de Unimed Pharm Chem, quien saltara a la fama tras conocerse el decomiso millonario de 205 millones de dólares en uno de sus domicilios en Lomas de Chapultepec, en marzo pasado, presumiblemente producto del tráfico de pseudoefedrina.
QUEHACER POLÍTICO tuvo acceso a información confidencial del caso, a la vez que platicó con fuentes gubernamentales abocadas a las indagatorias y del Gobierno federal, quienes por el momento solicitaron mantener en reserva su identidad. Y así, de esta información y testimonios, se desprende que Estados Unidos llegó a un pacto con Zhenli Ye Gon, en complacencia con las autoridades mexicanas. De estos datos, evidencias y revelaciones se desprende la siguiente historia.
Faltan por lo menos 600 millones de dólares
El escándalo estalló el viernes 16 de marzo de este año. Al día siguiente los medios informativos dieron cuenta de un hito en la historia policiaca de nuestro país: El decomiso de poco más de 205 millones de dólares, 200 mil euros, 157 mil 500 pesos (que después resultaron ser 17 millones 306 mil 520 pesos, según la PGR), diversos vehículos, joyas y siete armas de fuego, así como maquinaria para la fabricación de tabletas médicas. Tan sólo en 2006, la PGR decomisó 53 millones de dólares, producto de operativos contra el narcotráfico.
Al día siguiente del histórico aseguramiento, un grupo de preocupados empleados de Zhenli Ye Gon se dedicó a contactar abogados en busca de asesoría. La preocupación era mayúscula, toda vez que, confiaron a litigantes, ellos tenían a su cargo la custodia de tres casas de seguridad en el DF, y fortunas similares a la incautada en las Lomas de Chapultepec. Los empleados del chino-mexicano estaban preocupados y a toda costa querían evadir su eventual detención. Ellos recibieron la orden directa de su jefe (Zhenli Ye Gon) para abandonar los inmuebles y trasladarse junto con el dinero a otras propiedades de su patrón, en el interior de la República. Por ello también el interés de contactar abogados confiables que los ayudaran en el trasiego de este dinero, que estaba embalado en fajillas, exactamente igual que en la casona de las Lomas de Chapultepec, presuntamente producto del narcotráfico.
Las mismas fuentes aseguran, con conocimiento de causa, que estos empleados ya se encuentran en otras propiedades del empresario chino-mexicano, presumiblemente en el estado de México, Colima y Jalisco, donde permanecen escondidos junto con el dinero que sacaron de las tres casas de seguridad bajo su custodia. “Y es obvio que estos empleados, de los cuales ya sabe la PGR, pero no quiere dar a conocer sus nombres (mexicanos y orientales) le guardan una lealtad absoluta a Zhenli Ye Gon, de quien siguen recibiendo instrucciones, mismas que siguen al pie de la letra. Esta fidelidad obedece a que el empresario los trataba muy bien y les pagaba un súper sueldo.
“Ahora se sabe que los empleados detenidos en la residencia de Las Lomas –actualmente arraigados– fueron quienes aportaron a la PGR nombres de algunos otros trabajadores del chino-mexicano, mismos que ahora están escondidos con el dinero, unos 600 millones de dólares, por lo menos, pensando en que cada casa de seguridad guardaba 200 millones de dólares”.
ver artículo completo en el blog: El pedote de Fecal
No hay comentarios.:
Publicar un comentario