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06 junio 2007
La marcha de los señoritos...porque les quitaron sus taranovelas
La marcha de los señoritos: una demostración clara de la madurez de la democracia venezolana
Dozthor Zurlent
Rebelión
Mientras en Alemania crean una muralla de 10 kilómetros para defender a los miembros del G8, de los jóvenes que protestan; al resto de la humanidad la dejan desamparada de las medidas tomadas por las siete potencias que controlan la tecnología y el sistema financiero internacional.
Paralelamente en la República Bolivariana de Venezuela, el 28 de mayo, cientos de señoritos de las universidades elitescas del país, salían a la calle a demandar libertad y el derecho a protestar; quemaron carros, interrumpieron el tráfico, y ocasionaron heridos y desmanes y hasta la muerte de una señora que no pudo recibir atención médica porque el libre tránsito estaba obstruido.
Y entonces, volvieron a salir al siguiente día a protestar por el derecho a protestar y la libertad, y volvieron a salir al siguiente día, menos el Sábado porque ese día le tocó al pueblo humilde tomarse las calles de la ciudad y no había ni un callejoncito libre en las áreas más populosas de la ciudad donde ellos pudieran ir a protestar, además que "cuando sale el gato se recogen los ratones".
Pero salieron a protestar al día siguiente, y al otro y anuncian otra marcha en lo que los señoritos llaman la estrategia de desestabilización a largo plazo contra el gobierno. Y es aquí donde cabe aclarar cuál es la estrategia de la oposición golpista y el último fin de los señoritos.
Ya entrando el último trimestre del año 2006, justo cuando se iban a celebrar las elecciones presidenciales se produjo el primer alzón de los precios de los productos básicos, se disparó el dólar paralelo a alrededor de Bs. 4000 por dólar y comenzaron a desaparecer el azúcar, el pollo y la carne de los mercados. En esta misma coyuntura se produjo un aumento sustancial de las rentas de los apartamentos en la ciudad de Caracas. La idea era generar descontento para las elecciones, pero Chávez ganó las elecciones de todas maneras con amplio margen.
No habían terminado de pasar la celebración y la euforia, cuando las corporaciones comenzaron a incrementar las medidas antipopulares, la leche pasó a convertirse en un artículo de lujo encabezando los artículos de consumo masivo en peligro de extinción, y se incrementó el precio de todos los artículos de consumo, los precios de la vivienda se duplicaron y en algunos casos se triplicaron, y lo mismo pasó con la rentas de los alquileres de las viviendas, de tal manera que de pronto los venezolanos, aún los profesionales, no tenemos suficiente dinero ni para pagar por el sitio donde queremos vivir.
Estas medidas suponían crear descontento en la población y usar entonces a estos sectores descontentos como punta de lanza contra el gobierno revolucionario. Y claro que crearon descontento, pero la mayoría del pueblo sabe que los que están subiendo los alimentos y manipulando la moneda y los precios de la vivienda son precisamente los sectores de oposición al gobierno.
Debo aclarar en este punto que todas estas medidas económicas no se tomaban en un ambiente en frío sino que había una constante campaña en los medios de comunicación corporativo culpando al gobierno de ser incapaz de establecer medidas económicas que hicieran bajar los precios de los alimentos, que además el gobierno no le pagaba lo suficiente a los productores y por eso no aparecían los productos que habían desaparecido del mercado e incitando al pueblo a salir a la calle a protestar. No funcionó, la gente no salió a la calle.
ver artículo rebelión
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